Epidemia - Capítulo 8 - A thousand years (Mil años)

Epidemia – Capítulo 8 – A Thousand years (Mil años)

Cuando Arizona llegó a la sala de diálisis del hospital había cinco personas dializándose, pero todos eran adultos, así que Arizona un poco decepcionada, le preguntó a la enfermera:

-Disculpe, estoy buscando a un niño, un paciente, el se llama Sebastián ¿creo que le tocaba ser dializado hoy?

-Sí, efectivamente,… le contestó la enfermera amablemente, …-Pero hoy llegó muy temprano, lo dializaron y ya se fue a su casa. Debe regresar pasado mañana para su siguiente cita.

-Entiendo, dijo Arizona un tanto decepcionada, después que Teddy la convenciera, realmente tenia deseos de conocer a ese pequeño humano tan especial… -Ok, Muchas gracias, vendré pasado mañana entonces.

-A su orden, hasta luego

-Hasta luego, dijo Arizona retirándose de la sala. Ella se dirigió hacia la habitación de Callie, quería verla aunque fuera desde lejos, a través del vidrio. Cuando llegó, vio que ella estaba dormida y que Lexie estaba a su lado. De pronto, Arizona recordó el plan de Teddy y le hizo una seña a Lexie para que saliera de la habitación.

Cuando Lexie salió a su encuentro, le dijo a Arizona con una expresión preocupada: -Lo lamento Arizona, ¿ya te enteraste, verdad?

Arizona con seriedad le dijo: -Sí Lexie, ya lo supe, pero necesito pedirte un favor.

-Dime, lo que sea, contestó Lexie

-Esto te puede sonar extraño, pero por favor, por ningún motivo me menciones, a Callie quiero decir.

Lexie no dijo nada, pero su expresión intrigada decía más que mil palabras. Arizona no deseaba dar explicaciones, pero la solicitud era un tanto extraña, así que le dijo a Lexie:

-Verás no puedo explicártelo ahora, pero yo… yo necesito reconquistar a Callie, Teddy me dio una idea para hacerlo, pero para lograrlo es necesario que Callie aún no sepa nada de mi ¿comprendes?

Lexie sonrió dulcemente y le dijo: -Ok, entiendo. No te mencionaré y si lo deseas regaré la voz para que nadie lo haga ¿está bien?

-Sí perfecto, Gracias Lexie, eres un encanto.

Lexie volvió a sonreír y le preguntó: -¿Quieres quedarte con ella un rato, está dormida, así que no creo que te pueda ver ahora?

-No, Lexie, quédate tú con ella por favor, no me puedo arriesgar a que se despierte y me vea, no todavía. Yo me quedaré aquí afuera mirándola desde lejos, dijo Arizona con una sombra en su voz, odiaba estar tan cerca y al mismo tiempo tan lejos de Callie, pero por ahora no le quedaba otro remedio.

-Está bien, dijo Lexie… -Y suerte, te deseo buena suerte

-Gracias Lexie, contestó Arizona con una sonrisa, mientras Lexie entraba a la habitación de nuevo.

Arizona se sentó detrás del mostrador de enfermeras ubicado frente a la habitación de Callie, cuando vio a Mark acercándose con una expresión preocupada en su rostro, él la vio y se dirigió hacia Arizona diciéndole:

-Hola Arizona ¿Qué pasó? ¿Es verdad que Callie perdió la memoria?

-Sí, es verdad

-¡Oh Dios! Que malo eso, ¿ya Dereck la examinó?

-Sí, el confirmó el diagnostico pero dijo que en estos casos nunca se sabe si puede resultar algo temporal o permanente.

-Arizona ¿y tú qué piensas hacer?

Arizona pensó en sus palabras antes de decirlas, a Lexie podía hablarle con ciertas evasivas, pero para bien o para mal, Mark era el mejor amigo de Callie y posiblemente necesitaría de su ayuda para reconquistarla, así que inhaló y le dijo:

-Mark, antes del accidente y a pesar de todos mis esfuerzos Callie no me perdonó, o sí, ella dijo que me perdonaba, pero estaba tan herida que no quería saber nada de mí, yo me siento responsable por todo esto, yo la amo Mark, la amo de verdad y no quiero perderla. Teddy me recomendó que la reconquistara, que comenzara desde cero con ella, pero para eso necesito tiempo, necesito que nadie le hable de mí, debo ser yo la que la enfrente y se lo diga, a mi modo. No pienso mentirle, no puedo pensar en reconquistarla si comienzo con una mentira, pero no se lo puedo lanzar de una vez, necesito un poco de tiempo para saber la mejor manera de hacerlo ¿me explico?

Mark sonrió y le dijo a Arizona: -Robbins, la tienes difícil ¿cierto?

-Sí, un poco, dijo Arizona un tanto desanimada

-Esta bien, dijo Mark, -Yo no estoy nada contento con lo que le hiciste, pero yo se que ella te ama y tengo que reconocer que era feliz contigo, y enormemente triste por no tenerte a su lado, eso sí, si quieres que te ayude, que no le diga nada, debes prometerme algo, ahora mismo…

-¿Qué cosa?, preguntó Arizona con pesar, odiaba que Mark tuviera razón.

-Debes prometerme que nunca más la vas a dejar

Arizona con lágrimas en los ojos le dijo a Mark: -Te lo prometo Mark, dejarla fue el error más grande de mi vida, cuando me fui, yo no sabía cuánto la amaba, me dio miedo el compromiso y como tú mismo me dijiste, yo huí, salí huyendo, pero ahora se cuanto la amo, por primera vez en mi vida estoy enamorada y estoy dispuesta a hacer cualquier cosa, lo que sea para recuperarla y nunca, nunca más pienso abandonarla.

Mark sonrió y le dijo: -Ok, eso era lo que necesitaba escuchar. Por cierto, si ella me pregunta, ¿puedo contarle el resto de su vida, sin mencionarte a ti? Porque aunque esté desmemoriada, ella sigue siendo mi mejor amiga y al igual que tú tengo todas las intensiones de recuperar su amistad, desde cero, como tú dices.

Arizona sonrió al darse cuenta que la idea de Teddy no era tan original ni tan extraña, como ella pensó al principio, entonces mirando a Mark, le dijo: -Sí, puedes hacer lo que quieras, pero, no me menciones, omite esa parte de la historia ¿Ok?

-Ok, dijo Mark, -Ahora voy a entrar a verla

-Ok, ¡Ah! y Gracias Mark

-No hay problema Robbins, espero que tengas suerte, por tú bien y especialmente por el bien de Callie

-Gracias Mark

Mark asintió y entró a la habitación, mientras Arizona se quedó sentada donde estaba.

….

Al día siguiente, muy temprano, Arizona estaba sentada nuevamente en la silla detrás del puesto de enfermeras, mientras Mark estaba dentro de la habitación con Callie, velando su sueño. Aproximadamente a las 8:30 a.m., Arizona vio al Dr. Webber, acercándose hacia ella, él venía acompañado de otro médico, a quien Arizona no conocía, era un hombre alto, sumamente atractivo, de abundante cabello negro y ojos verdes, con evidente ascendencia latina. Cuando el Dr. Webber llegó al puesto de enfermeras, saludó a Arizona y le dijo:

-Buenos días  Dra. Robbins, me enteré del estado de la Dra. Torres, espero que no sea algo permanente… luego, dirigiendo momentáneamente su mirada al médico que le acompañaba y mirando a Arizona de nuevo, agregó: …-le presento al Dr. Alejandro Herrera.

El Dr. Herrera le tendió la mano a Arizona y dijo con una sonrisa: -Encantado de conocerla Dra. Robbins

Arizona le devolvió la sonrisa y le dijo: - Un placer Dr. Herrera

El Dr. Webber, agregó: -Él es cirujano ortopédico de la Clínica Mayo y amigo de mi familia desde hace muchos años. El tiene que pasar unas semanas en Seattle por asuntos familiares y le pedí que revisara las radiografías de la Dra. Torres, las de su brazo izquierdo. Como usted sabe, ella sufrió múltiples fracturas en ese brazo y cuando revisé las radiografías noté que el húmero no está posicionado adecuadamente y el Dr. Herrera me lo acaba de confirmar. Ella necesita ser operada en cuanto sea posible. Alejandro va a practicar la cirugía.

-¡Oh!, dijo Arizona, me alegro que esté aquí entonces Dr. Herrera, como usted ya debe saber la Dra. Torres es cirujana ortopédica, al igual que usted, pero como fue ella la que sufrió el accidente es obvio que no teníamos a nadie con su experiencia para realizar la adecuada fijación de su brazo, especialmente porque el cuadro era complejo debido a sus múltiples fracturas. ¿Cuándo piensa efectuar la operación?

-Estuve hablando con el Dr. Webber de eso, yo tengo que viajar esta noche a Londres, regresaré la próxima semana para efectuar la operación a la Dra. Torres.

-Perfecto, dijo Arizona

El Dr. Herrera asintió y entonces el Dr. Webber le dijo: -Vamos Alejandro, entremos a la habitación de la Dra. Torres para que la conozcas.

El Dr. Herrera asintió y dirigiéndose hacia la habitación de Callie, le dijo a Arizona: -Hasta luego Dra. Robbins, un placer

-Igualmente, dijo Arizona. Ella observó cuando el Dr. Webber y el Dr. Herrera entraron a la habitación mientras se sentaba de nuevo en la silla detrás del mostrador. Vio cuando el Dr. Webber hizo las presentaciones a Mark y a Callie, quien desde hace rato había despertado. Callie le sonrió y le dio la mano al Dr. Herrera y él le devolvió el saludo y la sonrisa, pero Arizona no pudo dejar de notar que mientras conversaban, el Dr. Herrera miraba a Callie con sumo interés y no precisamente desde el punto de vista médico. Ella se revolvió inquieta en su silla, Callie apenas estaba despertando y ya tenía el frente a un médico descaradamente atractivo mirándola como a algo más que una simple paciente.

Y lo peor es que cuando ambos médicos salieron de la habitación sus sospechas quedaron confirmadas, ella escuchó mientras ellos se alejaban por el pasillo que el Dr. Herrera le dijo al Dr. Webber: -Wow, Richard, tienes doctoras muy bellas en este hospital, especialmente mi colega y paciente, Calliope, es una mujer hermosísima y sumamente sexy, toda magullada y aún así se ve preciosa, esa sonrisa es simplemente hermosa y esos labios, Wow, dime ¿esta casada?, ¿comprometida?, ¿tiene novio? Webber se rió y le dijo: -No, ella no está casada ni comprometida ni tiene novio, pero cuidado Alejandro, yo te conozco tú eres uno de los solteros más codiciados de este país, un Casanova, además la Dra. Torres es tu paciente y sufre de amnesia, espero que temporal, así que no se te ocurra comenzar a acecharla con tus técnicas de seducción. El Dr. Herrera se comenzó a reír a carcajadas.

Arizona sintió que el fuego de los celos le quemaba las entrañas y le enfureció aún más que ese médico la llamara “Calliope”, ella era la única que la llamaba así. Arizona pensó furiosa: “Esto es lo único que me faltaba, un médico condenadamente atractivo y mujeriego, seduciendo a mi novia bisexual y desmemoriada, que ni siquiera recuerda que yo existo ¡Demonios! ¡Mierda!”.

Luego se desanimó aún más cuando recordó las palabras de Webber “ella no está casada, ni comprometida ni tiene novio”, pensando que la única responsable de que Callie no estuviera casada, ni comprometida ni tuviera novia, era ella misma, por haberle tenido pánico al compromiso, por haber puesto su carrera por encima de sus sentimientos, sentimientos que no había sido capaz de reconocer hasta que estuvo a miles de kilómetros de distancia ¡Mierda!

La risa de Callie la sacó de sus pensamientos, era obvio que Mark ya había comenzado a reconquistar su amistad, mientras ella tendría que esperar hasta el día siguiente para poder entrar en esa habitación con Sebastián, si tenía suerte. Arizona levantó la mirada, y aprovechando que Callie estaba distraída conversando amenamente con Mark, se le quedó mirándola un rato ¡Por Dios! como la extrañaba, le hacía tanta falta su presencia, su risa, sus abrazos, sus besos, sus caricias. En el fondo estaba agradecida de que Teddy hubiera tenido lo que ya ahora le parecía una brillante idea: reconquistar a Callie, sí, eso haría, si no tenía suerte con Sebastián, entonces haría exactamente lo mismo que hizo cuando la conoció, plantarle un beso en la boca, sin anestesia, pero de brazos cruzados no se iba  a quedar, mucho menos con ese médico pisándole los talones. Otra ráfaga de celos le atravesó las entrañas “¡Demonios!”.

Mientras tanto, dentro de la habitación ya Mark, se había presentado ante Callie, le dijo que él era su mejor amigo y que pensaba seguir siéndolo aunque ella no lo recordara. Callie no lo reconoció, obviamente, pero se sintió a gusto hablando con él. En medio de la conversación dos doctores habían entrado a la habitación y cuando ambos se retiraron, Mark bromeó con Callie diciéndole que ella ni siquiera se acordaba de su nombre y ya tenía un pretendiente, porque la mirada seductora del Dr. Herrera no pasó desapercibida para ninguno de los dos y Callie se rió a carcajadas con la observación de Mark, ella le dijo:

-Tengo que admitir que el Dr. Herrera es sumamente apuesto, pero no me inspiró nada, quizás me equivoque, pero me pareció arrogante y con respecto a ti Mark, no necesito mi memoria para darme cuenta que eres demasiado travieso, pero me simpatizas ¿sabes?, me siento a gusto hablando contigo, eres muy divertido, supongo que esa debe ser una de las razones por las cuales somos mejores amigos… Callie hizo una pausa y continuó: …Y aprovechando que eres mi mejor amigo, supongo que debes saber muchas cosas de mí, cuéntame algo, de mí, quiero decir, cuéntame algo de mi vida.

Mark comenzó su relato, teniendo especial cuidado de omitir cualquier aspecto relacionado con Arizona, tal como se lo había prometido a ella:

-Bueno, comenzaré con algo que ya tú sabes: -Te llamas Calliope Torres, naciste en Miami el 31 de Agosto de 1975, tu padre vive con tu madre en Miami, el se llama Carlos Torres y tú madre se llama Lucía Torres, tienes una hermana, menor que tú que se llama Aria. Vienes de una familia de mucho dinero, pero contrariamente a lo que tu padre prefería, que te dedicaras a los negocios de la familia y tomaras una carrera administrativa, tú decidiste estudiar medicina, decisión que tu padre respeto y aceptó. De hecho tienes a tu nombre un enorme fondo fiduciario con el que podrías comprar este hospital. Pero, a ti eso nunca te ha importado, eres una persona sencilla y sientes verdadera pasión por tu carrera, eres una de las más reconocidas cirujanas ortopédicas de este país. Una diosa con el bisturí...

Callie lo interrumpió: -Eso es ahora algo lamentable, porque en este momento no recuerdo ni siquiera el nombre de los huesos que tengo rotos.

Mark le dijo con un tono tranquilizador: -No te preocupes Torres, yo presiento que tú vas a recuperar la memoria, posiblemente de forma gradual como suele ocurrir en estos casos y se me ocurre una idea: Voy a traerte los videos de muchas operaciones realizadas por ti misma para que las veas, así podrás estimular tu memoria ¿qué te parece?.

-Excelente idea Mark, me gusta, dijo Callie animada, …-anda sígueme contando, cuéntame algo más personal, por ejemplo, de mi vida sentimental.

Mark soltó un bufido y dijo: -Ouch, Torres, en ese aspecto no te ha ido tan bien, por cierto, te lo digo de una vez para que estés enterada: Tú eres bisexual

-¿Cómo?, le dijo Callie, un poco impactada por la aclaratoria, ¡Bisexual!

-Pues sí, aunque últimamente estabas más interesada en las mujeres que en los hombres, por cierto, tú y yo en algún momento fuimos amigos…con derechos, pero eso fue hace tiempo, ahora solo somos buenos amigos

-¿En serio?, Callie se rió y con una sonrisa sexy, le preguntó: -¿y qué tal opero yo en ese departamento? En la cama, quiero decir ¿soy buena, regular o mala?

Mark se rió y le dijo: -Torres en ese departamento también eres una diosa, te lo digo con propiedad y una súper diosa, según me han dicho, en el departamento femenino, claro, al principio necesitaste cierta ayuda, cierto asesoramiento y fue cuando te enseñé el “Método Sloan”, yo te di algunas lecciones prácticas cuando tú me lo pediste

Callie soltó una carcajada y le dijo: -¡Oh Dios! ¿En serio? Tú también debes ser muy bueno si tienes hasta un método que lleva tu nombre.

Mark riendo le dijo: -Entre tú y yo Torres, nosotros dos somos dioses, nadie nos supera. Lo que Mark no sabía ó prefería ignorar y que Callie no recordaba, es que para ella su diosa tenía nombre y apellido: Arizona Robbins

Callie volvió a reír: -Un día de estos me vas a hablar más de ese método, pero en teoría Mark, en teoría… Era increíble como Callie se sentía hablando con Mark, ella aún estaba muy confundida, pero suponía que a pesar de haber perdido la memoria, sus afectos tenían que estar presentes en algún sitio, en su interior, de lo contrario sería inexplicable para ella tocar esos temas tan escabrosos sin ni siquiera sentir un poco de vergüenza.

Callie prosiguió: -Me dijiste que en el aspecto sentimental no había tenido mucha suerte, así que cuéntame ¿Qué quisiste decir? Mi pareja o mis parejas ¿se murieron, me fueron infieles o me dejaron?

Mark le dijo un poco más serio: -Callie, lamento decírtelo, pero la respuesta a esa pregunta es: todas las anteriores

-¡Todas las anteriores!, Wow, ¿Cómo así?

-Primero te enamoraste de un interno, el se llamaba George O´Malley, un buen día, luego de la muerte de su padre, llegaron de Las Vegas, casados, pero el matrimonio no duró mucho, unos meses nada más, porque Mr. O´Malley te fue infiel con otra interna de este hospital: Izzie Stevens, ella ya no trabaja aquí, la despidieron hace unos años. Cuando ustedes ya estaban separados, el tuvo un accidente, lo atropelló un autobús y murió.

-¡Todas las anteriores!, o sea, casada, traicionada, abandonada y luego viuda, Wow, menos mal que perdí la memoria, comentó Callie casi en tono de broma.

-Y eso no es nada Torres, todavía falta

-¿Más?

-Sí, cuando estabas en fase de recuperación por la infidelidad de tu ex marido, conociste a una cirujana cardiotorácica, Erica Hahn, primero se hicieron amigas, pero luego tú te sentiste atraída por ella y ella por ti, tú estabas confundida, nunca habías estado con una mujer antes, y ella tampoco, después de tu primera noche con ella, que según tú resultó desastrosa, fue cuando me pediste asesoría, el “Método Sloan”. Y el éxito fue rotundo… agregó Mark sonriendo, …-lo cierto es que ustedes siguieron saliendo, pero un día discutieron y ella se marchó del hospital, nunca más supimos de ella.

Callie suspiró y dijo: -Lo dicho, menos mal que perdí la memoria ¿Qué más Mark?

Mark sabía que en terreno sentimental el límite de su historia había llegado a su fin, porque lo que seguía tenía que ver con Arizona y de ella no iba a hablar, así que le dijo:

-Callie ya ha sido demasiada información por hoy ¿no te parece?. Además, tengo una cirugía en media hora y tengo que ir a prepararme. Mark se inclinó para darle un beso en la mejilla a Callie y luego saliendo de la habitación le dijo:

.Después de la operación, buscaré los videos que te prometí y te los traeré para que comiences a verlos ¿Ok?

-Ok, Mark Gracias, nos vemos.

Cuando Mark salió de la habitación, Callie tuvo la sensación de que faltaba algo en la historia, algo que Mark había evadido adrede, o quizás él tenía razón y había sido demasiada información para un solo día. Un rato después Callie bostezó, sintió sueño y se quedó dormida.

…

Arizona volvió a fijarse en Callie de nuevo mientras dormía, y viéndola allí en la habitación, sintió de pronto como su corazón comenzó a acelerarse, sólo con verla sus dudas y sus miedos se esfumaban, esa hermosa mujer era todo lo que ella quería, quizás lo que siempre quiso sin saber que lo quería, lo que siempre esperó sin saber que lo esperaba, lo que siempre soñó sin saber que lo soñaba, pero ahora que lo sabía, ahora que sabía que había encontrado al amor de su vida, por más miedo que sintiera, por más demonios que tuviera sobre sus espaldas, viéndola allí, entendió que tenía que ser valiente, ella no iba a permitir que nada ni nadie se la quitara, mañana entraría por esa puerta sola o con Sebastián, pero entraría, mañana estaría un paso más cerca de recuperarla, un paso más cerca de tenerla de nuevo entre sus brazos, un paso más cerca de besar sus labios, un paso más cerca de hacerle el amor, un paso más cerca…

A Thousand years – Christina Perri.mp3

Hacer clip en el título para acceder a la canción

Latidos del corazón, rápidos

Colores y promesas

¿Cómo ser valiente?

¿Cómo puedo amar cuando tengo miedo a caer?

Pero viendo que estas sola

Todas mis dudas de repente desaparecen de alguna manera

Un paso más cerca

Yo he muerto todos los días esperándote

Querida no tengas miedo yo te he amado

durante mil años

Te amaré por mil más

El tiempo se detiene

La belleza en todo lo que ella es

Voy a ser valiente

No voy a dejar que nada me quite

Lo que está delante de mí

Cada respiro

Cada hora ha llegado a esto

Un paso más cerca

Yo he muerto todos los días esperándote

Querida no tengas miedo yo te he amado

durante mil años

Te amaré por mil más

Y a lo largo creí que te encontraría

El tiempo ha traído tu corazón para mí

Yo te he amado por miles de años

Te amaré por mil más

Un paso más cerca

Un paso más cerca

Yo he muerto todos los días esperándote

Querida no tengas miedo yo te he amado

durante mil años

Te amaré por mil más

Y a lo largo creí que te encontraría

El tiempo ha traído tu corazón para mí

Yo te he amado por miles de años

Te amaré por mil más

Esta historia continuará…

No se pierdan mañana el próximo capítulo de esta historia, cuando Arizona se encontrará de nuevo frente a frente con Callie… un paso más cerca…

Y con respecto al guapo Dr. Herrera, bueno eso es para darle un toque de picante a esta historia…